^{El Dr. Emilio José Baños Ardavín, Rector de la UPAEP, ofreció una visión panorámica de la situación actual de la educación superior en México, destacando los desafíos y las oportunidades que enfrenta el país.}

El Dr. Baños subrayó la importancia de la educación superior como un motor clave para el desarrollo económico y social de una nación. Señaló que los desafíos de la educación superior en México están estrechamente ligados a la capacidad de la sociedad para innovar y aprovechar el talento, así como las tecnologías emergentes y los conocimientos aplicados. Destacó la necesidad de impulsar el desarrollo en todas las áreas económicas y sociales, con miras a lograr un crecimiento equitativo y sostenible. Esto durante su participación en el espacio informativo de Fernando Canales.

Señaló que de cara a los encuentros que los miembros de la Federación de Instituciones Mexicanas Particulares de Educación Superior (FIMPES) con las y el candidato a la Presidencia de la República, se han planteado que una de las preocupaciones principales es la baja tasa de cobertura educativa en comparación con otros países de Latinoamérica, con apenas un poco más del 40% de los jóvenes accediendo a la educación superior en México. Esta cifra contrasta significativamente con naciones como Argentina y Chile, que alcanzan tasas cercanas al 85%.

El debate sobre la calidad de la educación también es relevante, especialmente con el aumento de la educación en línea. Si bien existen instituciones serias comprometidas con el rigor académico, también hay instituciones con fines de lucro que carecen de este compromiso, lo que plantea desafíos tanto en México como a nivel mundial.

En cuanto a la distribución entre instituciones públicas y privadas, destacó que el 70% de la matrícula en educación privada está concentrada en apenas el 117 de las más de 2,100 universidades particulares en México. En el ámbito público, la disparidad de recursos es evidente, con algunas universidades manejando presupuestos significativamente mayores que otras.

Agregó que la inversión en investigación e innovación sigue siendo insuficiente, representando menos del 1% del PIB, y en los últimos años, esta inversión ha disminuido. Se resalta la necesidad de reformar las políticas de educación superior y de lograr congruencia entre lo que se aprueba en las leyes y los presupuestos asignados.

En este contexto, la innovación y la promoción del talento se presentan como pilares fundamentales para el desarrollo futuro del país. La educación superior juega un papel crucial en este aspecto, con un número cada vez mayor de mujeres destacándose en áreas académicas y de investigación.